La Guerra Civil y la dictadura franquista no solo transformaron España políticamente, sino que dejaron una huella profunda en sus familias. Este libro ofrece una mirada innovadora y multidisciplinar sobre cómo la represión, el miedo y la escasez marcaron la vida cotidiana entre 1939 y 1950, afectando a generaciones enteras.
A través de testimonios, cartas y archivos personales, se reconstruyen historias de resistencia y adaptación, mostrando cómo madres, esposas e hijos sostuvieron la vida en un país sometido a vigilancia y silencios impuestos. También es una historia de lucha: contra el olvido, la represión y la fractura de los lazos familiares.
Con un enfoque que combina historia, psicología y estudios de memoria, esta obra invita a reflexionar sobre las secuelas de la guerra en la identidad colectiva. Un estudio imprescindible para quienes buscan comprender no solo el pasado, sino los ecos que aún resuenan en la sociedad española actual.