Rechazar las orgías del ideario humanista no equivale a caer en la posmodernidad. De manera semejante, defender la verdad no necesariamente significa incurrir en dogmatismo. Contra el actual clima homogeneizador de tráfico mercenario de mercancías, informaciones y sentidos hermenéuticos, el singular acto de captación de la verdad filosóficamente defendido por Badiou, constituye una inspiración tanto para sociólogos y académicos como para toda persona interesada en esta búsqueda.