Un bala perdida amoral. Una mujer hermosa y desdichada con un marido inoportuno. Un problema con una macabra solución. Una solución que solo sirve para crear nuevos problemas que nadie podrá resolver.
Artículos relacionados
Vista previa: EL CARTERO SIEMPRE LLAMA DOS VECES
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información