El retrato de nuestro primer filósofo moderno.Ortega y Gasset, quizá distanciándose de su maestro Bonilla y SanMartín, autor de una aparatosa biografía de Luis Vives, sentenció consu rotundidad característica que la vida del filósofo valentino sereducía a nacer, estudiar, escribir y morir. Sin embargo, Vives oculta una historia apasionante. Ni la pretenciosa biografía de Bonilla nila minimalista descripción de Ortega dicen la verdad de Vives.Con el paso del tiempo, y dejando atrás las increíblesmanipulaciones de la época de Franco, un grupo importante einternacional de estudiosos ha multiplicado el conocimiento sobrenuestro primer filósofo moderno. Recogiendo todo ese saber,esta biografía ordena la existencia de Vives como ejemplo de un tipohumano excepcional, que supo ver la constelación inaugural de lamodernidad, en toda su problemática complejidad, con los ojos de unsefardita valenciano, pero también con la mente de un humanistaeuropeo. De este modo supo mantener con firmeza su intenso sentido dela filiación, de la concordia y la fidelidad a la patria, pero sinentrega